Los Gunners se llevaron una victoria sufrida contra los Spurs en el Derby de Londres.
En un de los partidos más importantes de la cuarta fecha de la Premier League, el Arsenal se impuso en el Derby de Londres y le ganó 1-0 al Tottenham, en el Tottenham Hotspur Stadium. En un encuentro más luchado que jugado, los dirigidos por Mikel Arteta aprovecharon una de las ínfimas posibilidades que tuvieron y, en una jugada de balón parado, definieron el partido y continúan sin perder en condición de visitante.
Los Gunners llegaban a este encuentro tras un agridulce empate 1-1 ante el Brighton, mientras que los Spurs llegaban golpeados luego de caer 2-1 como visitantes frente al Newcastle. La situación en la tabla de posiciones refleja realidades opuestas: Arsenal se encuentra como escolta del certamen, mientras que Tottenham ocupa la decimotercera posición, muy lejos de los puestos de vanguardia.
Primer tiempo: Arsenal y Tottenham no se sacaron ventaja
El primer tiempo tuvo un claro dominio en cuanto a la iniciativa por parte del Tottenham, que salió con el ímpetu propio de jugar como local. Aunque no generó ocasiones claras de gol, los Spurs lograron varias aproximaciones peligrosas que pusieron en alerta a la defensa rival.
Por su parte, el Arsenal optó por un planteamiento más cauteloso, replegándose y apostando a los contragolpes, intentando aprovechar los espacios dejados por los laterales y la defensa adelantada de los locales.
El encuentro, sin embargo, fue trabado y marcado por constantes interrupciones debido a una serie de faltas que cortaron el ritmo del juego. Ninguno de los equipos consiguió imponer su estilo y se marcharon al descanso sin sacarse ventaja en el marcador.
Segundo Tiempo: Arsenal gana en las alturas y se lleva la victoria
El segundo tiempo mantuvo la misma tónica que los primeros 45 minutos, con un juego trabado y constantes faltas de ambos equipos que cortaban el ritmo. Sin embargo, el Arsenal mostró una postura más sólida y eficaz, logrando generar más aproximaciones. Fue así que, en el minuto 64, los Gunners lograron romper el cero en el marcador gracias a un imponente cabezazo de Gabriel Magalhães, quien marcó el único gol del encuentro.
A partir de ese momento, el Tottenham sintió el impacto de estar en desventaja y, con el paso de los minutos, sus intentos de buscar el empate se volvieron más desordenados y menos peligrosos. Es importante destacar el sobresaliente rendimiento de los centrales del Arsenal, Gabriel y Saliba, quienes fueron clave al desactivar en varias ocasiones los ataques de los Spurs.
En los minutos finales, los Spurs tuvieron algunas aproximaciones, pero ninguna con la claridad necesaria para igualar el marcador. De esta manera, el Arsenal se llevó un trabajado triunfo por la mínima.
