El próximo derbi madrileño estará marcado por los insultos racistas contra Vinicius, ocultos bajo las mascarillas que esconderán la identidad de los culpables.
LaLiga se prepara para uno de los partidos más relevantes del año: el enfrentamiento entre el Real Madrid y el Atlético de Madrid en el Estadio Metropolitano.
Sin embargo, el partido ha quedado marcado por una polémica que no tiene nada que ver con el fútbol.
Parte de la afición colchonera ha lanzado una campaña para poder insultar a Vinicius Júnior sin ser identificados. Y lo harán utilizando mascarillas, en un acto que ya está generando indignación en redes sociales y en el mundo deportivo.
Vinicius, uno de los jugadores más destacados del conjunto blanco, ha sido víctima de repetidos actos racistas en varios estadios españoles.
Los cánticos y gritos que lo han llamado «mono», entre otros insultos racistas, han sido un problema recurrente, sobre todo en sus visitas al Metropolitano. Esta situación ha llevado a sanciones contra clubes y a la condena pública de los actos racistas, pero no ha logrado erradicarlos.
La campaña #MetropolitanoConMascarilla
Para el próximo derbi, algunos seguidores del Atlético de Madrid han impulsado una polémica campaña en redes sociales bajo el hashtag #MetropolitanoConMascarilla.
El objetivo de esta iniciativa es utilizar mascarillas para poder lanzar insultos racistas contra Vini sin ser identificados por las cámaras de seguridad o los agentes de la policía presentes en el estadio.
Uno de los promotores de la campaña escribió en Twitter: «El domingo no queda otra, quieren su circo, que ellos pongan los monos y payasos…». Esta frase cargada de odio racial ha despertado la alarma de muchos aficionados que condenan cualquier forma de discriminación en los campos de fútbol.
Otro usuario en redes fue más allá, alentando a la afición rojiblanca a acudir al estadio con mascarillas: «Propongo #MetropolitanoConMascarilla. Que en el derbi podamos decir las verdades que queramos sin miedo a ser sancionados individualmente. En Mestalla había infiltrados en la grada buscando cazar a los valencianistas. ProtejáMONOS».
Este mensaje hace referencia a lo ocurrido en otros estadios, donde las autoridades han intentado identificar y sancionar a los aficionados que lanzan insultos racistas.
Medidas insuficientes contra el racismo
La respuesta a la campaña no se ha hecho esperar. El propio Vinícius ha sido claro en su rechazo a los actos racistas en el pasado, y el Real Madrid siempre ha respaldado públicamente a su jugador en estos momentos de adversidad.
No obstante, las sanciones impuestas por los organismos deportivos, como la RFEF, han sido vistas por muchos como insuficientes para erradicar este tipo de comportamientos.
El uso de mascarillas como una forma de evitar las consecuencias legales por estos actos es un nuevo reto para las autoridades.
En anteriores ocasiones, las sanciones han dependido de la identificación de los responsables mediante imágenes de vídeo, pero el uso de mascarillas complica este proceso.
En este contexto, la policía se enfrenta a un dilema: cómo actuar ante un grupo de aficionados que, aunque estén protegidos por una mascarilla, podrían estar violando las leyes contra el racismo y el odio.
Las críticas no han sido solo contra los aficionados del Atlético que promueven estas ideas, sino también contra la aparente falta de herramientas para combatir este tipo de actos.
Las imágenes de aficionados insultando a Vinícius en estadios de toda España han dado la vuelta al mundo, y el hecho de que esta campaña esté ganando popularidad es, para muchos, una señal preocupante del estado del racismo en el deporte español.
