Los jugadores franceses se retiraron del terreno de juego después de los gestos realizados por un aficionado.
Una vez más, un gesto racista azota en los terrenos de juego. Esta vez, no ha sido en un partido oficial, pero sí en un encuentro seguido a nivel mundial, ‘El Partidazo de Youtubers 5’.
La secuencia de la vergüenza racista
Concretamente, en el minuto 56 de partido, se detuvo el encuentro después de que un aficionado dirigiese un gesto racista a un jugador francés, que se encaró con la grada para recriminar esta actitud.
Un episodio que obligó a detener el encuentro hasta la expulsión de la persona que realizó el gesto racista. Posteriormente, tras la mediación de Cristóbal Soria, el árbitro del partido, KokoDC y DjMariio, el capitán del equipo español, los jugadores franceses regresaron al terreno de juego para continuar jugando.
Minutos más tarde, tras la expulsión del racista del Metropolitano, el partido se reanudó con normalidad. «Estoy triste. Es intolerable. Le pido a Mario que hable con los hinchas», expuso el capitán francés.
DjMaRiiO cogió el micrófono y pidió respeto: «Gente, esto es un partido de youtubers, por favor, no hagamos el tonto. Estamos en 2024. Vamos a pasarlo bien», dijo el capitán español.
«Es la primera vez que soy víctima de racismo. He venido aquí para jugar al fútbol. Si el equipo lo acepta, vamos a continuar con el partido», fueron las palabras del afectado de los hechos.
Un partido muy esperado
La Selección Española de creadores de contenido se enfrentaban nada más y nada menos que a la francesa, en lo que era una oportunidad de revancha única después de que en la tercera edición del evento de DjMariio los galos vencieran por 2-0 a los nuestros.
Pero los nuestros no quería únicamente vengar el resultado, también lo vivido en Francia, ya que en ese partido de ida, los creadores de contenido españoles sufrieron una ‘encerrona’, ya que primero, los galos eran muy superiores a los nuestros, y segundo, la Selección Española vivía en primera persona lo que era la hostilidad, tanto por parte de los rivales, como por parte de la afición local, como del colectivo arbitral.
Pues bien, con este contexto, nos podíamos esperar que este partido de vuelta fuera muy caliente, y la verdad es que no ha defraudado para nada. Ya en la primera parte, Peereira protagonizaba un pique con un jugador francés que Cristóbal Soria, el árbitro del encuentro, ‘frenaba de raíz’.
Ya en la segunda parte, sucedía lo que todo el mundo quería evitar, que el show pasara una línea roja, y es que los franceses se iban del campo del Metropolitano con peinetas hacia la grada tras acusar a un sector de la afición de hacer gestos racistas hacia los jugadores franceses.
Un capítulo más, sin que pueda existir el comodín que tanto gusta de la provocación, que demuestra que en este país aún hay muchas conciencias que remover. Quizás España no sea un país racista, pero sí tiene evidentes problemas de racismo.