Andy Carroll, exjugador de equipos como Newcastle, Liverpool o West Ham, está protagonizando una historia de amor de las que ya no quedan en el fútbol. Este verano, el inglés recibió una oferta millonaria para marcharse a Arabia Saudí, pero no se dejó seducir por la tentativa árabe. Tirando de corazón, Carroll fichó por el histórico Girondins de Burdeos, actualmente militando en la cuarta división del fútbol francés por motivos económicos.
Cobra el sueldo mínimo
«Con mi sueldo no puedo pagar ni el alquiler», declaró el jugador en sus primeros días con el club. El inglés cobra el mínimo salarial fijado por la federación francesa: 2.500 € al mes, con los que no puede costearse el alquiler de su piso en Burdeos. Rivales amateurs, estadios humildes y viajes largos en bus definen la experiencia del fútbol modesto, del que ahora forma parte Carroll.
Fichaje récord en la Premier
El delantero vivió sus mejores años en la élite del fútbol inglés. Empezó su andadura en la cantera de un Newcastle, por ese entonces en segunda división, hasta llegar a debutar con el primer equipo. Fue el gran artífice del ascenso de las urracas a la premier y destaco en su primer año en la máxima división del fútbol inglés.
Con tan solo 22 años, el Liverpool se fijó en él para ser el remplazo de Fernando Torres. Los reds pagaron 41 millones de euros por Carroll, convirtiéndolo en el segundo fichaje inglés más caro de la historia por ese entonces. Tras dos temporadas marcadas por las lesiones, el Liverpool decidió darle salida al West Ham, donde pasaría la mayor parte de su carrera.
Las lesiones le seguían lastrando, por lo que Carroll tuvo que buscar refugio lejos de su tierra, y lo encontró en Francia. La pasada campaña fichaba por el Amiens de Ligue 2, y este verano, decidió bajarse al barro para ayudar a un Girondins de Burdeos en estado crítico.
Un histórico de Francia
Yendo a la temporada 08/09, se encuentra un Burdeos campeón de Ligue 1, copa de la liga y Supercopa francesa, reinando en la élite del fútbol francés. El éxito del club no fue algo efímero, ganaron la copa de Francia en la 12/13, y llegaron a disputar la Europa League en repetidas ocasiones, por última vez en el curso 18/19.
En total, el Girondins de Burdeos acumula 6 Ligas, 4 copas de Francia, 3 supercopas y 3 copas de la Liga, y es el séptimo equipo más laureado del fútbol francés. Estrellas como Zinedine Zidane, Pedro Pauleta, Jules Koundé o Aurélien Tchouaméni, salieron de la cantera del club.
El descenso al infierno
El club descendió a Ligue 2 hace dos temporadas, y arrastraba una deuda de unos 88 millones de euros. La situación era insostenible, y este mismo verano el club descendía a tercera división administrativamente. Tan solo dos días después, el club emitía un comunicado demoledor, donde desistía de su estatus como club profesional.
Al dejar de ser una entidad profesional, todos los jugadores del club quedaron libres automáticamente. Por si fuera poco, el club también tuvo que cerrar la cantera, dejando sin equipo a todos aquellos chavales que formaran parte de ella.
¿Y ahora qué?
Está claro que la llegada de Andy Carroll es un soplo de aire fresco para el club francés, pero queda mucho trabajo por hacer. Actualmente, el Burdeos se sitúa décimo en el grupo B de la National 2 (cuarta división francesa), con Carroll como clara referencia en ataque. El inglés ha marcado 5 goles en sus primeros tres partidos y da esperanzas a los aficionados que unos meses atrás lo veían todo perdido.