Liverpool y Aston Villa se enfrentaban a las 21:00, hora española, en un duelo clave para ambos conjuntos. Por parte de los locales, el ganar significaba ir lideres otra jornada más en Premier League y alejarse de sus principales perseguidores. Y por parte de los visitantes, sumar tres puntos ayudaba a seguir por la lucha de los puestos Champions.
Primera mitad: Asedio red
Tras la melodía del You’ll Never Walk Alone cantada a capela, el esférico empezó a rodar en un Anfield vestido de gala para la ocasión.
El Liverpool arrancó con una marcha extra de lo que es habitual, debido a la derrota del City en Brighton. Esto causó que el equipo de Emery se viese embotellado en campo propio. Los chicos de Slot hacían una presión asfixiante en terreno contrario.
El espectáculo inicial se vio pausado durante unos minutos gracias a los talentos como Tielemans o Ramsey, que permitieron coger aire al Aston Villa. Pero, en el minuto 20’, una contra provocada por un error visitante acabó en un gol de Darwin, que desató la fiesta en Anfield.
El cuento de hadas de Slot se entristeció cuando Trent Alexander-Arnold tuvo que ser sustituido por una molestia muscular, minutos después del gol.
La afición red siguió presenciando el estado de gracia de su equipo, conducido por el peligro en transiciones y la presión tras pérdida, que el Liverpool estaba ejecutando a la perfección.
El Villa intentó reaccionar con dos remates a boca jarro, pero se encontró con un muro irlandés llamado Kelleher, salvando al conjunto del Merseyside de un hipotético empate en el marcador.
Con la lesión del inglés, Ramsey y el Liverpool continuando con si plan de partido, el colegiado David Coote, señaló el camino a los vestuarios.
Segunda mitad: Dominio y sentencia
El comienzo de la segunda parte no esperó a nadie, ni a los aficionados, que se pudieron perder un posible empate del Aston Villa a manos de Rogers, que pilló al Liverpool un tanto dormido.
Los de Emery salieron más despiertos que los de Slot, que se vieron afectados por el descanso reglamentario. Eso provocó que los de Birmingham gozaran de varias ocasiones para poner las tablas en el marcador, ante unos reds que intentaban bajar las pulsaciones del encuentro.
La rebeldía tan característica del Aston Villa de Emery se desvaneció cuando los reds estaban más ausentes en el partido . Por ese motivo, los locales iban ralentizando el partido a base de posesiones largas y con poca verticalidad.
Con un marcador ajustado, los villanos se animaron a ir al ataque. Eso produjo otro contragolpe por esa banda derecha, liderada por Salah, que frente al caos, él paró el tiempo y finalizó con mucha calma y serenidad.
Después del tanto del egipcio, en los instantes finales, Anfield Road volvió a crear un atmósfera única para celebrar el triunfo red y el buen rendimiento de los suyos en esta campaña.
Próximos encuentros de Liverpool y Aston Villa
Después del parón de selecciones, el Liverpool va tener que jugar en St. Mary’s Stadium para enfrentarse contra los colistas de la liga, el Southampton.
Mientras que el Aston Villa va a tener que buscar la victoria frente al Crystal Palace, en Villa Park.