Cuando hace tan solo unos meses Hansi Flick se hizo con los mandos de este Barça, nadie, ni siquiera el aficionado más optimista o el periodista más positivo, podía imaginar el nivel que está mostrando el equipo.
El club venía de una época de dudas en la que Xavi Hernández no pudo sacar todo el potencial del equipo y, teniendo en cuenta las dificultades y momentos de mala suerte como aquel de Araújo en Champions, el aficionado culé no vivía con gran optimismo el futuro. Eran varios años de incertidumbre, mezclando momentos de buen juego con rachas de indefinición, lesiones de jugadores relevantes y el constante suplicio cuando llegaban los viajes por Europa.
La llegada de Flick gustaba, pero no suponía un impulso lo suficientemente grande a la emoción de los necesitados fans blaugranas. Además, el hecho de tener una plantilla excesivamente joven y la salida de jugadores tan importantes como Gündogan, tampoco parecían las mejores noticias.
Hansi Flick consiguió darle un nuevo aire al Barça
Sin embargo, el perfil bajo de Hansi ante los medios y la opinión pública, su idea futbolística de presión, intensidad y verticalidad y la buena conexión con la plantilla, han convertido al Barça en uno de los equipos más atractivos de ver en toda Europa. Y, todo esto, con una plantilla que, por edad, no dista mucho de la de un filial.
Pero, ¿es tan joven la plantilla como parece?, ¿Es el Barça de Flick un juego de niños? Para hacerse una idea clara, el equipo presenta una edad media de poco más de 24 años. Llamativo, aunque este hecho crece si eliminamos de la ecuación a los cuatro jugadores más veteranos del equipo; Ter Stegen (32), Iñigo Martínez (33), Szczęsny (34), y Robert Lewandowski (36). Son los únicos componentes de la plantilla culé que se pueden considerar veteranos, porque para encontrar al siguiente jugador de mayor edad, hay que fijarse en los 28 años de Andreas Christensen. Por tanto, sin los 4 veteranos, el equipo presenta una edad media de apenas 22 años, con mención especial a los 17 de Lamine Yamal y Cubarsí, los 20 de Gavi o los 21 de Pedri, Casadó y Fermín. Un hecho sin precedentes y muy significativo para un club de la entidad del Barcelona.
¿Es el inicio de una nueva época dorada del equipo blaugrana?
El tiempo lo dirá. A pesar de no ser una tarea fácil, por lo exigente del objetivo, lo que hasta ahora sí se puede afirmar, es que un grupo de jóvenes han asumido el reto mayúsculo de capitanear a uno de los gigantes europeos y, como quien juega en el patio del instituto o con su grupo de amigos en la cancha del barrio, lo están haciendo de maravilla. ¡Un juego de niños en un entorno de máxima presión deportiva!