El entrenador del Celta sin creerse el empate de su equipo

El estadio de Balaídos acogía el primer Celta de Vigo vs FC Barcelona de la temporada. El partido, correspondiente a la jornada 14 de La Liga, servía a los dos conjuntos para buscar un triunfo que se les resistió en su última cita en el campeonato doméstico.

Mientras que el conjunto azulgrana llegaba tras una derrota en el Reale Arena por 1 gol a 0, tras firmar un pobre encuentro; los de Giráldez llegaban al partido en Vigo tras un duro empate, en el último minuto, ante el Real Betis (2-2).

El conjunto vigués, con uno de sus mejores inicios de los últimos años en el campeonato español, se situaba undécimo en la clasificación tras empatar en la última jornada ante el Real Betis. Un encuentro que tuvo un desenlace cruel para los de Claudio Giráldez, que vieron como les empataban el partido en el añadido. Los de Vigo, que han convertido Balaídos en un fortín imponente, saben lo que es ganar al Barça en ese estadio y estaban convencidos de que son capaces de volver a conseguir la gesta.

El conjunto azulgrana llegaba tras un eterno parón de selecciones que ha alargado la sombra de su última derrota ante la Real Sociedad. Reviviendo las pesadillas del pasado, los culers, volvieron a caer en un estadio que se les resistió durante muchos años. La mala noticia para los de Flick, es que por segunda jornada consecutiva volvían a tener una cita a domicilio visitando Balaídos. Por si los azulgranas no llegaban con suficiente presión, el estadio vigués es el que peor se le ha dado al conjunto azulgrana en Liga, en la última década.

Primera parte: Sin convencer, pero ventaja para el FC Barcelona

El Barcelona volvía a LaLiga después del parón de selecciones con una novedad en el 11 de Flick: Gavi volvía a jugar como titular en el centro del campo, después de diversas apariciones empezando en el banquillo. Los culés salieron con el objetivo de consolidar esa ventaja de la que disfrutan con respecto a Real Madrid y Atlético de Madrid.

Pero el Celta salió muy metido en el partido. Con una ocasión de Aspas que acabó en el poste tras un centro de Mingueza y con Douvikas intentándolo en ataque.

Casi un cuarto de hora y Giráldez estaba consiguiendo que el Celta tuviera más balón que el Barcelona y crear más daño a la espalda de los centrales. Ilaix Moriba pendiente de Casadó cuando el Barcelona estaba en fase de salida. Cuando el Celta tenía el balón, acudía como falso interior para dar libertad a Mingueza y atraer más hombres del Barcelona al costado izquierdo.

El Celta se fue a por el empate tras el tanto culé por parte de Raphinha y Gerard Martín tuvo que intervenir para evitar el gol en el disparo de Hugo Álvarez. Después, Iñaki Peña realizó una gran intervención para despejar un potente disparo de Ilaix Moriba desde fuera del área. Y Bamba posteriormente remataría cerca del larguero. El Celta siguió asediando a Peña y llegó a pedir penalti por una caída de Iago Aspas ante Gerard Martín, que Soto Grado no consideró pena máxima.

El Celta, atacando bien por las bandas y haciéndolo rápido. Por eso hoy al Barcelona le estaba costando hacer el fuera de juego, porque los de Giráldez tenían el plan claro y entrenado. Elementos que hacen que el Barça estuviera más pendiente de vigilancias individuales.

Raphinha quiere ser el mejor futbolista de la 24/25. Otro gol, otra acción de lucha, de ganar al defensor cuando parece todo perdido. El pase de Koundé, delicia. La definición del brasileño, escándalo. Mingueza, mal perfilado y se queda fuera de jugada. Es increíble cómo el estado de forma y la confianza le está permitiendo mostrar una finura y calidad técnica que no parecía tener en sus años anteriores.

A poco que el Celta aflojaba las primeras presiones, había margen para encontrar el pase cruzado de Iñigo a Pedri como hombre libre. En el FC Barcelona, muchísima precipitación: Raphinha, Cubarsí, Olmo o Gavi. Balones demasiado directos sobre la última línea cuando el partido te pedía estirar posesiones. En cada pérdida, el Celta hacía mucho daño en transición.

Giráldez consiguió que el Barcelona hiciera aguas con balón. Un total de 44 perdidas en el conjunto de los centrocampista y Lewandowski. Números preocupantes que solo lo camufla el gol de Raphinha.

En los minutos finales de la primera parte, el Barcelona recuperó la iniciativa. Lewandowski marcó un gol de vaselina, pero fue anulado por posición adelantada del polaco. Después, Dani Olmo remató ajustado al poste pero Guaita detuvo el lanzamiento en dos tiempos.

El descanso llegó con una polémica de Gerard Martín al no ver la segunda amarilla tras una fea entrada sobre Iago Aspas. Acción a destiempo y sinsentido. Se volvió loco Iago Aspas, que pedía que haya VAR yendo al monitor, por lo que sufrió amonestación.

Los árbitros siguen viendo más grave una protesta que una patada. Les molesta más lo que les dicen a ellos que lo que les hacen a los jugadores. Los protagonistas son los futbolistas, hay que recordar esto.

Segunda parte: Locura en Balaídos

Pero el Barcelona volvió a la carga. Primero con un disparo de Raphinha y después con el tanto del Pichichi. Lewandowski luchó por varios rechaces y acabó batiendo a Guaita de disparo raso para hacer el 0-2.

El Celta no se dio por vencido y tuvo dos buenas ocasiones en las botas de Alfon y de Hugo Álvarez y llegó a forzar la expulsión de Marc Casadó por doble amarilla tras un agarrón a Ilaix Moriba.

Pero quién iba a decir que al Barcelona se le podía escapar el partido cuando ganaba 0-2 en el minuto 81. Alfon acortó distancias robando el balón a Koundé con una presión efectiva y batiendo por bajo a Iñaki Peña en el minuto 83.

En el 85 llegó el delirio a Balaídos. Hugo Álvarez recibió un balón en la derecha tras un pase de Mingueza. El internacional sub 21 amagó a Fort y soltó un disparo cruzado para batir a Peña.

Más allá de los errores de bulto en los dos tantos del empate del Celta, había un denominador común: el Barcelona instalado en la precipitación.El equipo apenas lograba estirar posesiones y comenzó a rifar balones, incluso desde Iñaki Peña.

El naufragio del Barcelona en intensidad y concentración defensiva es para hacérselo mirar. Martín, Fort, Cubarsí, Koundé se une a la fiesta… El partido con más pérdidas del Barcelona en toda la temporada.

En los minutos finales el Celta buscó el tercero pero, pese a que no llegó, en Vigo finalizaron muy satisfechos por remontar un 0-2 adverso ante el líder.

La mejor noticia de la noche ha sido el gran partido de Gavi. No ha brillado como si fuera una de sus grandes noches, pero ha competido como si la lesión que le ha dejado fuera un año no hubiera existido. Es maravilloso.

Próximos compromisos

Por parte del Celta, viajará a Barcelona para enfrentar al RCD Espanyol el 30 de noviembre.

Por parte del FC Barcelona, recibirá al Stade Bretois en Champions League. En competición doméstica, recibirá a la UD Las Palmas el 30 de noviembre.

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