El Manchester City de Pep Guardiola buscaba cortar la sangría de resultados ante un Everton en forma contra los grandes. En los dos últimos partidos, ante Arsenal y Chelsea, cosecharon dos valiosos empates en los que anularon a sus rivales, con un plan defensivo ejecutado a la perfección. Un partido que abrió la mítica jornada de Boxing Day, con un City plagado de bajas y muchos canteranos en el banquillo, que volvió a ser incapaz de superar a su rival, dejando un juego muy pobre en ataque y la misma fragilidad en defensa.
Primera parte: Tablas en el Etihad
Un arranque habitual. El City empezó a mover la bola ante un Everton metido atrás esperando las contras. Como era de esperar, la primera ocasión cayó del lado SkyBlue. Tras un saque de esquina, Gvardiol conectó un cabezazo que se estrelló en el poste de la portería de Pickford.
Un inicio absolutamente dominante del City, mucho más dinámico y reconocible que en partidos anteriores y que se puso por delante en el minuto trece. Pase en profundidad para Bernardo Silva que, tras un tiro cruzado, superó a un Pickford mal colocado y algo señalado en el gol. Mejor en ataque, pero igual de mal en defensa.
El City de Pep seguía siendo muy endeble atrás y el empate llegó con el primer toque del Everton desde dentro del área. Centro lateral de Doucouré que llegó a Ndiaye y, tras controlar, colocó el balón en la escuadra de Ortega con un golpeo de «trivela». Golazo de los «Toffes» para empatar, en el minuto 36.
El intercambio de golpes continuó en el último cuarto de hora de la primera parte, algo más alocada, pero sin ocasiones claras para mover el marcador. Con el pitido del árbitro, ambos equipos se marcharon a vestuarios con el empate en el electrónico.
Segunda parte: Cortocircuito citizen
El segundo acto empezó con el City volcado al ataque. Varias ocasiones seguidas a las que Pickford respondió con seguridad, con un penalti parado incluido. Un pena máxima que se veía venir. Savinho estaba siendo de lo mejor en ataque, encarando una y otra vez a un Mykolenko incómodo en defensa que trabó al brasileño dentro del área. Haaland fue el encargado de lanzar, pero Pickford le ganó el duelo con una buena estirada abajo. Sequía del noruego, que continuaba mostrando estar totalmente falto de confianza.
La presión de los locales no acertaba en ninguna jugada, dejando que el Everton transitara constantemente contra una defensa Citizen que dejaba muchos espacios atrás. Poco a poco los visitantes llevaban el partido a su terreno, en el que parecía estar más cerca el 1-2 que el 2-1, a pesar de la mala ejecución en ataque de los «Toffes». Guardiola trató de corregir a su equipo, que empezaba a estar plano en ataque. Para ello dio entrada a Kevin De Bruyne, todavía con problemas físicos que le impedían estar al 100%.
Un cambio que ni siquiera animó a la grada local, prácticamente en silencio durante gran parte del partido y temiendo que los resultados de los últimos partidos volviera a repetirse. Y motivos no le faltaban. Un equipo muy errático en ataque, en el que ya ni los regates de Savinho generaban ventaja y que sólo podía esperar un destello de calidad de sus estrellas para ponerse por delante. El Everton siguió a lo suyo, defendiendo muy atrás aunque con más dificultades para llegar al ataque, casi dando por bueno un nuevo empate ante un «Big Six».
Un partido que pudo llevarse el Everton en la última jugada, muy mal gestionada por Broja y Harrison, que no acertaron a la contra. Sin tiempo para más, y después una mala segunda parte de ambos, la sangría del Mnchester City continuaba tras un empate sí contentó al Everton, que se alejaba un poco más de la zona de descenso.
Próximos compromisos de Manchester City y Everton
El Manchester City visitará el próximo domingo al Leicester City de Ruud van Nistelrooy.
Por su parte, el Everton recibirá en Goodison Park al equipo revelación de esta temporada: el Nottingham Forest de Nuno Espírito Santo.
Ambos partidos corresponden a la decimonovena jornada de Premier League.