Tras la victoria por 1-4 en Marbella, el Real Murcia da un golpe encima de la mesa y presenta su firme candidatura por el liderato. El ascenso directo es el objetivo más importante de los pimentoneros y saben que dependen de sí mismos. Quieren volver a Segunda División 11 temporadas después y quieren hacerlo por la vía rápida.
El pinchazo del Antequera frente al Ibiza y las victorias de Mérida y Ceuta, hacen que los 5 primeros del grupo 2 de Primera RFEF estén en tan solo 5 puntos. Ninguno se puede permitir fallar en las 15 jornadas que restan y quedan muchos enfrentamientos directos. Pero no solo hay 5 equipos peleando por el liderato. Entre los puestos de play off y los de descenso, tan solo hay 8 puntos, por lo que cualquier equipo puede hundirse o acceder a la zona alta de la clasificación.
Muchos recursos
Los de la capital del Segura tienen el ascenso directo al alcance de su mano y cuentan con muchas armas para conseguirlo. El fondo de armario es algo que ha estado ayudando mucho a los granas en estas últimas jornadas y algo que se pudo ver ayer en Marbella.
Palmberg, que ha sido gran parte de la temporada suplente, está rindiendo muy bien para suplir al lesionado Moha. Jugadores como Pedro Benito o Boateng, que han ido perdiendo protagonismo con el paso de las jornadas, salieron con ganas de demostrar y ayudar con su despliegue físico. Los recién llegados como Flakus o Ian Forns fueron fundamentales para la gran victoria del equipo.
Además la versatilidad de jugadores como Pedro León, David Vicente, Jorge Mier o Pedro Benito y la vuelta de Isi Gómez, hacen del Real Murcia uno de los equipos más completos de toda la categoría.
Refuerzos
Flakus, que llega cedido del Castellón, aprovechó su primera titularidad firmando un gol y una asistencia y siendo el mejor jugador del partido. Davo, otro jugador ofensivo procedente del Deportivo de La Coruña, contó con algo más de 10 minutos en los que no tuvo ocasión de demostrar su potencial. Pero los 8 goles que marcó el año pasado y que ayudaron a los gallegos a conseguir el ascenso, hacen de él un jugador muy prometedor.
Por su parte, Ian Forns llega para completar una posición que solo contaba con una pieza, como era la del lateral izquierdo. El ex canterano del Espanyol estaba cedido en el Burgos CF, pero no estaba contando con muchos minutos. Por lo que, bajar una categoría le puede ayudar para consolidarse como un gran lateral y para coger confianza de cara a futuras temporadas.
Isi Gómez regresa también a la plantilla grana después de casi 9 meses parado. Una lesión en su tobillo en el tramo final de la temporada pasada lo ha mantenido apartado todo este tiempo. El madrileño era una de los jugadores clave la campaña pasada y desde el club saben de su importancia dentro del campo.
Alcanzar la perfección
Una de las tareas pendientes de los granas, tal y como ha señalado alguna vez Fran Fernández, es que el equipo tiene que hacerse fuerte en casa. Hasta ahora, son el décimo mejor local del grupo, mientras que es el mejor visitante. Mejorar la dinámica de resultados en casa es clave para poder optar a la primera plaza. Por ello, contar con un campo de cerca de 32.000 personas es una baza que el Murcia debe explotar para someter al rival con un ambiente adverso.
En cuanto al juego, el Real Murcia es un equipo que sufre mucho con los balones aéreos. Casi un tercio de los goles que ha encajado (6/19), han sido en acciones a balón parado o en centros laterales. La solidez defensiva que han venido demostrando los pimentoneros se ve vulnerada cuando los rivales envían balones aéreos al área. La contundencia que demuestran por dentro y en los duelos individuales se ve perjudicada cuando por jugadas aisladas se te escapan puntos.
Otro aspecto a mejorar es el ataque posicional. La verticalidad de los jugadores de banda y la calidad individual de los jugadores interiores, obliga a los rivales a defender en un bloque bajo que al Real Murcia le cuesta atacar. Son varios los partidos en los que a los pimentoneros les cuesta hacer daño a equipos que se meten atrás y esperan la pérdida para salir a la contra. Flecos que Fran Fernández tratará de solventar para poder optar a todo de aquí a final de liga.
Esta es una temporada clave para un club que se encuentra en un momento de estabilidad institucional y económica del que no gozaba desde décadas. Con una cantera en crecimiento, con un proyecto de ciudad deportiva a la vuelta de la esquina y con una afición de primera, que nunca deja solo al equipo, el objetivo está claro. 15 jornadas para tratar de devolver al conocido «Rey de Segunda División» a la categoría de plata.