Manuel Pellegrini, técnico del Real Betis, compareció en la rueda de prensa post-partido, en la que su equipo perdió por 0-1, pero pasaron a octavos, ya que ganaron por 0-3 en Bélgica.
El objetivo cumplido
Pellegrini comenzó destacando que el objetivo principal se había cumplido: estar en el sorteo de los octavos de final. Sin embargo, no ocultó su descontento con la actuación del equipo en este segundo partido, señalando que no lograron mantener el nivel exhibido en la ida.
«No hicimos el partido que queríamos. A pesar de haber ganado 0-3 allí, entrar a jugar con esa mentalidad sería nefasto, y hoy se notó que no estuvimos al 100%», afirmó. El técnico subrayó que, aunque el Betis dominó el primer tiempo y generó ocasiones, faltó eficacia en la definición, un aspecto que consideró clave para haber cerrado el encuentro sin sobresaltos.
Manuel Pellegrini sobre el bajón que pegó su equipo en la segunda mitad
El entrenador también abordó el bajón en el segundo tiempo, donde el Gent se mostró más incisivo y logró el gol de la victoria parcial a través de un tanto tardío. Pellegrini atribuyó este cambio a las rotaciones realizadas, reconociendo que la diferencia de nivel entre los titulares habituales y los suplentes se hizo evidente.
«Hicimos cambios pensando en el partido del domingo, pero no podemos permitir que el equipo baje tanto el rendimiento. Es algo que debemos corregir», explicó. Asimismo, lamentó la expulsión de Vitor Roque al final del encuentro, un incidente que complicó los minutos finales y que calificó como innecesario.
Optimismo con el equipo, a pesar de la derrota
A pesar de la derrota, Pellegrini mantuvo un tono optimista respecto al futuro del equipo en la competición. Valoró el esfuerzo colectivo en la eliminatoria y reiteró su confianza en la línea futbolística del Betis.
«El convencimiento de lo que hacemos no lo cambiamos. La ida fue un gran partido, y aunque hoy no estuvimos finos, la clasificación está asegurada», señaló. También aprovechó para elogiar el apoyo de la afición, que llenó el Villamarín y respaldó al equipo incluso en un día gris. «La gente merece que le demos más alegrías como la de Gante», añadió.
Finalmente, Pellegrini miró hacia adelante, enfocándose en los octavos de final y en la necesidad de recuperar regularidad en LaLiga. «Ahora toca pensar en el Getafe y luego en el próximo rival europeo. Queremos ser un equipo competitivo en todas las competiciones», concluyó.
Sus palabras reflejaron un balance entre la satisfacción por el pase y la exigencia de mejorar, manteniendo intacta su filosofía de trabajo pese a los tropiezos puntuales. Este análisis deja entrever que, para el chileno, la derrota en la vuelta es un aviso, pero no un punto de inflexión que altere su proyecto.