La Tercera RFEF llega a su ocaso en una competición cargada de incógnitas e incertidumbres en cuanto a las clasificaciones finales de los equipos se refiere. En esta jornada número veintidós, todos los partidos tienen intereses tanto por arriba como en la parte baja de la tabla.
Una zona alta digna de Tercera RFEF
Por arriba, la tabla no puede estar más apretada de lo que se encuentra. SD Huesca B, CD Ebro, CD Binéfar y CD Cuarte se distancian en apenas cinco puntos y cualquier derrota puede resultar clave en la lucha por el ascenso.
El CD Cuarte recibe en casa al Belchite en un partido de punta a punta de la tabla. Si bien los de Loreto llegan con una buena racha, no deben fiarse de un Belchite siempre peleón y que les pondrá las cosas difíciles.
La SD Huesca B se mide a uno de los equipos más rocosos de la categoría, como es el CD Utrillas. Los turolenses han conseguido sacar la cabeza de la zona baja de la tabla con dos victorias consecutivas y harán del encuentro un embite complicado.
El CD Binéfar y el CD Ebro reciben en sus casas a Épila y Monzón, respectivamente. El conjunto oscense deberá rendir al máximo ante un Monzón en la zona de relax y el CD Ebro deberá pelear para sacar la victoria ante el siempre combativo Épila.
Una zona media mas viva que nunca
La zona de playoff del grupo XVII de Tercera RFEF está que arde. Zuera y Monzón se miden en un duro duelo por la zona de privilegio. Una zona por la que quieren pujar La Almunia, quien se enfrenta al Almudévar, que lucha por salir de la zona de descenso. El Tamarite también está inmerso en la pelea, pero deberá vencer en un complicado enfrentamiento ante el CD Caspe.
El descenso, al rojo vivo
El descenso va a ser caro de decidir. Uno de los encuentros entre dos equipos implicados en ella es el que medirá a la UD Fraga y al CD Fuentes. Los fragatinos llevan dos encuentros seguidos de mala racha y quieren dar el golpe sobre la mesa en La Estacada. Por su parte, el CD Fuentes acumula demasiados encuentros sin vencer y necesita ganar para no entrar en peligro de mantenerse en Tercera RFEF.
Un peligro del que quiere huir el CD Brea, que desde la llegada de Jorge Abad ha resucitado. Para confirmarlo, visitará a un Andorra que está realizando una campaña espectacular pese a ser recién ascendido y al cual es muy difícil de vencer en casa.