Pese a empezar por detrás en el marcador, los teutones dan la vuelta al electrónico y obtienen un magnífico resultado para la vuelta. Alemania continúa por la senda de la victoria y demostró su gran capacidad ofensiva.
Las palabras de Rüdiger y una primera parte caótica
En la rueda de prensa previa al partido, el central alemán del Real Madrid atendió a los medios y dijo que están dispuestos a ir con todo a por el título, ya que la final a cuatro se celebrará en Alemania y tras el ambiente de la Euro, quieren contagiar a su gente del gen ganador y soñar con levantar el trofeo en sus tierras.
Ya en el partido, Nagelsmann dispuso a Tah junto al berlinés en la línea defensiva. El bávaro es un seleccionador y un entrenador fantástico pero no se entiende su predilección por un zaguero tan tendente al fallo como el capitán del Bayer Leverkusen, quien tras un error propició el primer tanto -obra de Tonali- de una Azzurra que salió valiente y dispuesta a llevar la iniciativa en los primeros compases del encuentro.
Segunda parte: Kimmich hace de controlador aéreo y Alemania ata la victoria
Sin Wirtz -baja por lesión-, Alemania no encontraba una conexión entre sus jugadores ofensivos y organizadores hasta que un fantástico Kimmich entró en escena y sirvió un fantástico centro a un Tim Kleindienst que remató solo dentro del área y puso el empate tras un gran remate cruzado al palo derecho de la portería italiana. Metódicos y calculadores, como se los suele caracterizar, los alemanes aplicaron la misma fórmula, esta vez desde la esquina derecha. Goretzka fue el que remató, cruzando su testarazo al palo izquierdo y poniendo punto y final al partido pese a que corría poco más del minuto 70′.
De esta manera, los alemanes recibirán a los italianos con una renta muy favorable para estar en la final de junio, pero antes deberán rematar el trabajo en casa.
