Guadalajara Conquense

El CD Guadalajara recibía en el inexpugnable Pedro Escartín, que contó en la tarde de hoy con 2468 espectadores, a una UB Conquense que, si bien llegaba al encuentro con la vitola de tapado, no tenía intenciones de ponerles las cosas fáciles a los de Pere Martí, incontestables líderes de la competición. Los alcarreños acudían a este duelo, el encargado de inaugurar la jornada 28 en el grupo V de Segunda Federación, tras acumular 25 jornadas sin conocer la derrota. Por su parte, los de Róber Gutiérrez se encontraban en el mejor momento de la temporada, tras sumar doce de los últimos quince puntos disputados.

Primera parte: Primero blanquinegro, luego morado

Los primeros compases del encuentro transcurrieron bajo un cielo gris, siguiendo la tónica del día, si bien es cierto que las precipitaciones respetaron a protagonistas y espectadores por igual. En este panorama emergió Joan Monterde como la figura capaz de aportar calma a las posesiones del Conquense. De sus botas (y habilidad) salieron buenas acciones individuales y colectivas que acabaron con sendas acciones a balón parado favorables a su equipo. En una de estas llegó la primera clara para la Balompédica. Un gran regate de Antonio Fernández acabó convirtiéndose en una asistencia para el propio Monterde, cuyo disparo contó con la mala fortuna de estrellarse contra el palo.

No tardó en presentar el cuadro alcarreño sus credenciales. Al buen arranque de los de Róber Gutiérrez le siguió un gran cuarto de hora por parte del CD Guadalajara en el que el terreno de juego parecía estar inclinado hacia la portería defendida por Raúl Bernabeu. Presión asfixiante mediante, los pupilos de Pere Martí impidieron a los visitantes respirar y estirarse. Mientras, entre líneas, los Manu Ramírez, Neskes y Toño Calvo encontraban líneas de pase a las espaldas de los centrocampistas para poner en jaque al conjunto blanquinegro. Manu Ramírez, en dos ocasiones, Neskes y Cañizo, cuyo tanto fue invalidado por fuera de juego, llevaron el peligro sobre la meta visitante.

Dominio territorial morado

El dominio territorial siguió correspondiendo al Guadalajara, aunque los niveles de acoso sobre el Conquense bajaron considerablemente. En el minuto 26 Julio Martínez, tras una dejada de tacón protagonizada por Ablanque a la salida de un córner, reventó el esférico por encima de los dominios de Raúl Bernabeu. Mientras, unos omnipresentes Unax Álvarez y Manu Ramírez probaban fortuna desde la lejanía. El cuadro visitante trató, en la medida de lo posible, hacerse con posesiones de balón largas para enfriar el ímpetu local. Lo consiguieron en los últimos cinco minutos del primer acto, momento en el que Antonio Fernández, delantero blanquinegro, conectó una gran volea cruzada que hizo enmudecer por un segundo al Pedro Escartín, antes de salir ligeramente desviada.

Segunda parte: La locura se desata en el descuento

Al inicio de la segunda mitad, la igualdad volvió a restablecerse. Ambos técnicos introdujeron piernas frescas para afrontar los últimos 45 minutos, en parte, condicionados por las amonestaciones. Pablo Rojo entró sustituyendo a Tavares y Luis Castillo hizo lo propio en detrimento de Etxebe, quien no paró de sufrir por banda las constantes acometidas de un talentoso Julio Martínez.

Con mayor o menor peligro, la segunda parte continuó transcurriendo por los mismos derroteros. El CD Guadalajara seguía siendo el dueño del balón, mientras que la premisa de la UB Conquense para hacer daño era clara: robar y hacer daño en las contras. Cuando el reloj marcaba la hora de juego, Neskes disparó a la cepa del poste, llevando el «huy» a las gradas del Pedro Escartín. Por su parte, Yuya Yoshimura tuvo la opción de inaugurar el marcador finalizando un contragolpe, aunque su tiro se marchó alto.

Bajón en el ritmo del encuentro… y se desató la locura

La reaparición de la lluvia coincidió con la fase más trabada del choque. Desde la gran ocasión de Alex Krehl, quien envió su zapatazo al larguero en el minuto 70, los parones en el juego se sucedieron. El Conquense estaba logrando lo que se había propuesto antes del encuentro: hacer que el partido fuera largo y que poco a poco los nervios y la impaciencia se fueran apoderando de la parroquia alcarreña.

Y, cuando parecía que el partido moría, llegó la acción de la que los alcarreños podrían acabar acordándose a final de temporada. En el minuto 90, un saque de esquina botado desde la izquierda fue prolongado en el primer palo para que el capitán, Ablanque, rematara con el alma para batir a Raúl Bernabeu y llevar al delirio a los casi 3000 espectadores que hoy se dieron cita en el Pedro Escartín.

Todavía con tiempo para redondear la fiesta, el Depor duplicó la ventaja en el tiempo añadido. Con muchos metros para correr, Alex Krehl recibió un balón al hueco y definió por arriba con categoría, cerrando así el encuentro y desatando la fiesta entre la afición morada. Su equipo, el Guadalajara, acababa de conseguir una victoria épica frente al Conquense que supone un paso de gigante en la carrera por el ascenso directo.

Próximos compromisos de Deportivo Guadalajara y UB Conquense

Los alcarreños viajarán el próximo sábado hasta la provincia de Toledo para enfrentarse al Illescas e intentar, así, seguir poniendo tierra de por medio sobre sus perseguidores.

El conjunto dirigido por Róber Gutiérrez volverá a medirse a otro de los punteros de la competición: el Talavera. Lo hará en La Fuensanta, el próximo domingo 30 de marzo a las 17:00 horas.

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