La relación entre la afición del Chelsea y Todd Boehly, copropietario y presidente del club londinense, nunca ha sido la mejor desde su llegada a Londres. El inversor americano siempre ha estado muy discutido por sus decisiones y su forma de dirigir la entidad, algo que ha empeorado tras las últimas noticias sobre su vínculo con una web de reventa de entradas.
Boehly y un claro conflicto de intereses
Todd Boehly es inversor y director de Vivid Seats, una empresa de intercambio y reventa de entradas en la que aficionados de fuera del Reino Unido pueden comprar tickets de la Premier League, entre otros eventos deportivos, a precios muy elevados. Además, la empresa estadounidense aparece en el sitio web de la Premier League como «sitio web de venta de entradas no autorizado«, por lo que la liga insta a los aficionados a «extremar la precaución» cuando la utilicen.
La web ofrece las entradas a un precio muy por encima de su valor nominal. Por ejemplo, las entradas anunciadas en Vivid Seats para el próximo partido del Chelsea contra el Tottenham Hotspur en Stamford Bridge el 3 de abril oscilan entre 144 y más de 2.000 libras, mientras que las entradas para el partido en casa contra el Liverpool el 2 de mayo tienen un precio de entre 442 y más de 3.200 libras. Por contra, en la propia página web del Chelsea, la entrada general de adulto más cara cuesta 80 libras (96 euros).
Unos precios desorbitados a los que hay que sumarle el hecho de que la legislación británica prohíbe la compra de entradas en este tipo de webs, por lo que la empresa de Boehly estaría actuando en contra de la política de venta de entradas del Chelsea y la Premier League.
De hecho, el propio club describe las ventas no autorizadas como un «problema creciente«. En su sitio web afirma que «es ilegal vender u ofrecer la venta de entradas para los partidos del Chelsea Football Club sin la autorización del club» y que «los aficionados a los que se descubra vendiendo su entrada por un precio superior a su valor nominal serán objeto de una investigación y sanciones por parte del club«.
El Chelsea Supporters Trust exige una investigación
Ante esta situación, varios medios, entre ellos The Athletic, han asegurado que el Chelsea Supporters Trust (CST), la mayor asociación de aficionados del conjunto Blue, se ha puesto en contacto con el CEO de la Premier League, Richard Masters, exigiendo una investigación sobre la relación de Boehly con Vivid Seats.
A través de una carta abierta, el CST ha expresado que «Vivid Seats continúa ofreciendo entradas de la Premier League por encima de su valor nominal a precios significativamente inflados, y nuestros miembros siguen considerando que la conexión del Sr. Boehly con Vivid Seats constituye un abuso de confianza y un claro conflicto de intereses».
«Esto no sólo socava los esfuerzos del Chelsea FC, la Premier League y la Policía Metropolitana para combatir la reventa de entradas, sino que Vivid Seats contraviene la política de venta de entradas del Chelsea FC, y la Premier League la menciona explícitamente como un sitio web de venta de entradas no autorizado», continua el texto.
«Creemos que ha llegado el momento de que la Premier League actúe con rapidez y garantice que un importante accionista de un club de la Premier League deje de facilitar la venta de entradas por un precio significativamente superior a su valor nominal».
Una carta que contó con el apoyo de la Asociación de Aficionados al Fútbol (FSA), que declaró que «Los clubes, los grupos de aficionados, la policía y la propia Premier League han trabajado duro en los últimos años para combatir la reventa de entradas: no hay excusa para que el propietario de un club participe en una actividad de este tipo».