El pasado 25 de febrero, el Estadi Olímpic Lluís Companys fue testigo de un auténtico espectáculo futbolístico en el partido de ida de las semifinales de la Copa del Rey entre el FC Barcelona y el Atlético de Madrid, que terminó con un vibrante empate 4-4. Este encuentro, cargado de emociones, goles y alternativas, dejó la eliminatoria completamente abierta para la vuelta.
Un inicio frenético: El Atlético de Madrid golpeó primero al FC Barcelona
El partido arrancó con una intensidad desbordante por parte del Atlético de Madrid. Apenas a los 46 segundos, Julián Álvarez aprovechó una jugada a balón parado para cabecear un centro de Antoine Griezmann y poner el 0-1.
Cinco minutos después, el propio Griezmann amplió la ventaja con un remate tras una asistencia de Álvarez, silenciando a la afición culé y colocando un sorprendente 0-2. Este comienzo relámpago reflejó la eficacia del equipo de Diego Simeone en las jugadas ensayadas y su capacidad para sorprender a un Barcelona que aún no encontraba su ritmo.
La reacción culé: Remontada en dos actos
Lejos de rendirse, el Barcelona demostró su carácter y calidad para darle la vuelta al marcador antes del descanso. En el minuto 19, Pedri recortó distancias con un disparo preciso tras una gran combinación con Lamine Yamal y Jules Koundé.
Apenas dos minutos después, Pau Cubarsí igualó el encuentro con un remate en el área, evidenciando la fragilidad defensiva del Atlético en ese tramo. Finalmente, en el 41’, Íñigo Martínez culminó la remontada con un cabezazo a la salida de un córner, llevando al Barça al descanso con un 3-2 que parecía consolidar su dominio tras un inicio titubeante.
Segunda parte: Intercambio de golpes y resiliencia
El segundo tiempo mantuvo la emoción, aunque con menos goles en su primera mitad. El Barcelona, liderado por un inspirado Lamine Yamal, amplió su ventaja en el minuto 74 gracias a un gol de Robert Lewandowski, quien aprovechó un centro del joven extremo para poner el 4-2.
Sin embargo, el Atlético, fiel a su espíritu combativo, no bajó los brazos. En el 84’, Marcos Llorente recortó distancias con un derechazo desde la frontal tras una asistencia de Ángel Correa, y en el tiempo añadido, Alexander Sørloth firmó el 4-4 definitivo a pase de Samu Lino, dejando un final de infarto que rescató la oportunidad de luchar con todo, mañana, en el Riyadh Air Metropolitano.
Las claves del partido entre FC Barcelona y Atlético de Madrid
El encuentro destacó por el papel estelar de varios jugadores. Lamine Yamal, con su desborde y visión, fue clave en la reacción del Barcelona, mientras que Pedri brilló como el motor del mediocampo culé.
Por el lado del Atlético, Julián Álvarez y Griezmann fueron determinantes en ataque, y los cambios de Simeone, como la entrada de Llorente y Sørloth, resultaron decisivos. Tacticamente, el Barça dominó la posesión y buscó el juego asociativo, pero dejó espacios que el Atlético explotó con transiciones rápidas y jugadas a balón parado.
Todo por decidir en Madrid
El 4-4 deja la eliminatoria en un punto de máxima tensión. Aunque el Barcelona lamentará haber perdido una ventaja de 4-2, la ausencia del valor doble de los goles fuera de casa iguala las fuerzas.
El Atlético, con cuatro tantos marcados en Montjuïc y el factor campo en la vuelta, parte con una ligera ventaja psicológica, pero el potencial ofensivo del Barça promete un duelo igualado. Ambos equipos deberán ajustar detalles defensivos si aspiran a alcanzar la final del 26 de abril.