Tras una temporada estrepitosa en todos los sentidos, sin abandonar la zona baja de la tabla en toda la temporada, el Racing de Ferrol consumó su descenso a la Primera Federación tras perder por 2-1 en los Juegos Mediterráneos ante la UD Almería. Con respecto a la gran primera temporada que cuajó el conjunto ferrolano en la Segunda División, se han hecho muchas cosas mal en esta segunda campaña.
Un regreso efímero al fútbol profesional
El Racing de Ferrol volvió a la Segunda División el pasado 27 de mayo de 2025, tras vencer por 2-0 al filial del Celta de Vigo, en A Malata, en la última jornada de competición. El conjunto ferrolano no pisaba la segunda categoría del fútbol español desde hace 15 temporadas, donde pasó los peores momentos de su historia, llegando a jugar en la Tercera División durante 4 años.
La temporada 23/24 comenzó de la mejor manera, con una primera vuelta más que ilusionante, llegando a pisar los puestos de ascenso durante bastantes jornadas. Los principales jugadores de ese Racing de Ferrol eran nombres que ahora mismo juegan en LaLiga EA Sports, como son Íker Losada y Carlos Vicente. Llegado el mercado de fichajes, el Deportivo Alavés se hizo con los servicios de este último por la irrisoria cifra de 600 mil euros.
Esta salida afectó a los de Parralo, completando una segunda vuelta de campeonato mucho más irregular, pero terminando igualmente en la décima posición, muy cerca de los play-offs de ascenso. Sin duda, fue un gran papel para ser un recién ascendido, pero lo más importante de todo es que volvió a enganchar a la ciudad de Ferrol a su equipo, algo que no duraría demasiado.
El mercado de fichajes, un gran problema
El mercado de fichajes no ayudó a ser nada optimista, con las salidas de jugadores vitales para el equipo: Íker Losada, Gazzaniga, Cantero, Héber Pena y Jon García. Tras sufrir estas sensibles bajas, era evidente que el equipo necesitaba refuerzos en todas las líneas. Los fichajes llegaron, pero la plantilla ni se asomaba al nivel del equipo conformado la temporada pasada.
En la portería se vivió una revolución total tras las salidas de Gazzaniga y Cantero. Llegaron el vetarano Yoel Rodríguez y Jesús Ruiz para defender la meta de A Malata; fue este último quien se hizo con la titularidad y, mientras le respetaron las lesiones, fue el mejor jugador del equipo. En la defensa, Naldo fue el fichaje que mejor rendimiento dio – aunque su rendimiento bajó en la segunda vuelta -, Aleksa Puric no hizo olvidar a Jon García y Cabaco no pudo hacerse con la titularidad.
Los fichajes en la medular sí invitaron a la confianza, con las incorporaciones de Luis Perea y Álvaro Sanz. Sin embargo, el exfutbolista del Leganés no pudo mejorar al Bernal de la campaña pasada y el futbolista zaragozano cumplió durante la etapa de Parralo en el banquillo, pero se terminó disipando. En la delantera, Bebé fue el fichaje más ilusionante, pero no fue más que un espejismo; Josué Dorrio y Manu Vallejo no dieron la talla; y Jauregi comenzó enchufado la temporada, pero no pudo mantener el nivel.
Una falta de gol preocupante en el Racing de Ferrol
Una de las principales consecuencias de la mala gestión de los fichajes durante el verano fue la falta de gol. Jauregi empezó bien, metiendo goles durante la primera vuelta, con Cristóbal Parralo en el banquillo, pero cuando su capacidad goleadora se disipó, nadie tomó su relevo, ni un Manu Vallejo testimonial ni Josué Dorrio consiguiendo encontrar la regularidad.
Esto causó una estadística negativa que ya se ha quedado para la historia del conjunto ferrolano. El equipo acumuló un total 768 minutos sin marcar, superando los 657 de la temporada 2019-2020, convirtiéndose en la peor racha sin marcar de la historia. En toda la temporada, los gallegos solamente han anotado 20 tantos en las 37 jornadas disputadas, incluso el colista Cartagena ha anotado más.
Rendimiento pésimo en A Malata
A pesar de la gran expectación generada durante la temporada 23/24, atrayendo a mucha gente a bajar al estadio cada dos fines de semana, el equipo no aprovechó la fuerza de su público, dejando unos números paupérrimos como local. Tan solo dos victorias en A Malata, anotando solamente 10 goles en 18 partidos, y sumando solamente 13 puntos de 54 posibles.
Únicamente el Cartagena ha empeorado los números de este Racing de Ferrol como local, sumando 9 puntos en 18 partidos, con los mismos goles, tantos anotados como encajados, que el conjunto ferrolano, 10 tantos anotados y 25 goles encajados.
La destitución del artífice del ascenso
Cristóbal Parralo llegó al banquillo de A Malata el 10 de febrero de 2021, sustituyendo a Emilio Larraz. En su primera temporada, con el equipo en la Primera Federación, consiguió clasificarlo para el play-off de ascenso, donde cayó contra el Gimnàstic de Tarragona. Sin embargo, el club optó por renovar su contrato por dos años más, culminando el ascenso el 27 de mayo de 2023, ante el Celta Fortuna.
El Racing de Parralo se definía por ser un bloque muy sólido, un equipo luchador que no se amedrentaba ante ningún equipo, la cual era su mayor virtud y que le permitió, en gran parte, volver al fútbol profesional. Claro está que, tras una primera temporada espectacular, la primera vuelta de la segunda campaña en la segunda categoría del fútbol español no fue la mejor. Aun así, parecía que la dirección deportiva mantenía la confianza en él, pero una sanción de cinco partidos tras ser expulsado en Zaragoza y una abultada derrota por 6-0 en Santander cavaron su tumba.
La llegada de Alejandro Menéndez intentó cambiar la dinámica, incluso parecía que se podría conseguir, con una victoria en el debut del técnico en el Ciutat de Valencia, pero nada más lejos de la realidad. De hecho, la dinámica del equipo empeoró, llegando a sufrir una racha negativa de dos meses sin ganar.