La FIFA ha decidido que el Mundial 2030 será una edición única, con un formato innovador que llevará la Copa del Mundo a tres continentes distintos: Europa, África y Asia. España, Marruecos y Portugal han sido seleccionados como anfitriones para este torneo, marcando un hito histórico que no solo celebrará los 100 años del mundial, sino que también será un testimonio del poder global del fútbol.
Aunque aún no se sabe cómo se distribuirán las rondas del torneo entre los estadios de cada país, las sedes ya han sido confirmadas, lo que marca el comienzo de la cuenta atrás para uno de los Mundiales más esperados de la historia. Las selecciones con más mundiales son Brasil (5 títulos), Alemania (4 títulos) e Italia (4 títulos). El máximo goleador histórico de los mundiales es Miroslav Klose de Alemania, con 16 goles, seguido de Ronaldo Nazário de Brasil, con 15.
España: Potencia futbolística con sedes de renombre
España, con su rica tradición futbolística y su infraestructura de primer nivel, será uno de los países protagonistas en este mundial. Las sedes confirmadas en el país incluyen algunas de las ciudades más emblemáticas de Europa:
- Santiago Bernabéu (Madrid): Capacidad de 78.297, con la posibilidad de albergar la final.
- Camp Nou (Barcelona): Capacidad de 103.447, con capacidad para la final.
- Metropolitano (Madrid): Capacidad de 70.650, con la posibilidad de albergar semifinales.
- Riazor (A Coruña): Capacidad de 48.015, con la posibilidad de albergar octavos de final.
- RCDE Stadium (Barcelona): Capacidad de 40.259, con la posibilidad de albergar cuartos de final.
- San Mamés (Bilbao): Capacidad de 53.633, con la posibilidad de albergar cuartos de final.
- Estadio Gran Canaria (Las Palmas): Capacidad de 44.500, con la posibilidad de albergar cuartos de final.
- La Rosaleda (Málaga): Capacidad de 45.000, con la posibilidad de albergar cuartos de final.
- Anoeta (San Sebastián): Capacidad de 42.300, con la posibilidad de albergar cuartos de final.
- Nuevo Romareda (Zaragoza): Capacidad de 43.144, con la posibilidad de albergar octavos de final.
- La Cartuja (Sevilla): Capacidad de 71.000, con la posibilidad de albergar semifinales.
España ha sido sede de un mundial en una ocasión, en 1982, donde la selección italiana se coronó campeona al derrotar a Alemania 3-1 en la final. En 2010, España logró su primer título mundial, al vencer a los Países Bajos 1-0 en la final de Sudáfrica. Recientemente, La Roja ganó la Eurocopa, prolongando su legado de talento y éxito en el fútbol europeo.
Marruecos: Un sueño africano hecho realidad
Marruecos será el anfitrión de varias sedes importantes en el continente africano. Las ciudades seleccionadas y sus estadios incluyen:
- Gran Estadio Hassan II (Casablanca): Capacidad de 115.000, con la posibilidad de albergar la final.
- Gran Estadio Agadir: Capacidad de 46.000, con la posibilidad de albergar cuartos de final.
- Gran Estadio Fés: Capacidad de 55.800, con la posibilidad de albergar cuartos de final.
- Gran Estadio Marrakech: Capacidad de 45.860, con la posibilidad de albergar cuartos de final.
- Príncipe Moulay Abdellah (Rabat): Capacidad de 68.700, con la posibilidad de albergar semifinales.
- Gran Estadio de Tánger: Capacidad de 75.600, con la posibilidad de albergar semifinales.
Marruecos ha sido sede del mundial en una ocasión, en 1970, aunque no pasó de la fase de grupos. Sin embargo, su historia en la Copa del Mundo ha sido notable, siendo el primer país africano en llegar a los octavos de final en 1986 en México, donde fue eliminado por Alemania. Marruecos sigue siendo un equipo competitivo en el ámbito internacional, destacándose en el reciente mundial de 2022 en Catar, donde alcanzó las semifinales y terminó en cuarto lugar.
En el mundial de 2030, Marruecos tendrá una oportunidad histórica para destacar como anfitrión y mostrar la creciente potencia del fútbol africano.
Portugal: La pasión futbolística de la península ibérica
Portugal contará con las siguientes sedes para el mundial de 2030:
- Estadio Da Luz (Lisboa): Capacidad de 65.209, con la posibilidad de albergar semifinales.
- Estadio José Alvalade (Lisboa): Capacidad de 50.103, con la posibilidad de albergar octavos de final.
- Estadio do Dragão (Oporto): Capacidad de 51.075, con la posibilidad de albergar cuartos de final.
Los lusos han sido sede de la Copa del Mundo en una ocasión, en 2006, llegando a la semifinal, donde fue derrotado por Francia. En ese mismo torneo, Italia se coronó campeona, al ganar a Francia en una tanda de penaltis después de un empate 1-1. La selección de Portugal, encabezada por figuras como Cristiano Ronaldo y Luis Figo, ha sido una de las más competitivas en los últimos años, pero nunca ha logrado ganar un mundial.
El fútbol portugués sigue siendo reconocido por su talento y el mundial 2030 será una oportunidad única para que el país celebre su rica historia futbolística, con el Estadio Da Luz y el Estadio do Dragão como epicentros de este evento.
Mundial 2034 : Un megaproyecto rodeado de controversia
Arabia Saudita será el anfitrión de la Copa del Mundo 2034 con un ambicioso proyecto arquitectónico, pero también enfrenta críticas por la falta de derechos humanos y el trabajo forzado.
Arabia Saudita se prepara para albergar la Copa del Mundo 2034 con un megaproyecto de infraestructura que incluye la construcción de 11 estadios nuevos y la renovación de 4 estadios existentes. El estadio mas llamativo del torneo será el King Salman Stadium, con capacidad para 92.000 personas, que acogerá la final y el partido inaugural. Este ambicioso proyecto promete estadios de diseños futuristas y tecnología avanzada, pero también genera controversia.
El país tiene una década por delante para cumplir con los plazos de construcción, pero las críticas no han tardado en surgir. Las denuncias sobre falta de derechos humanos y trabajo forzado han empañado los preparativos. Organizaciones internacionales alertan sobre las condiciones de los trabajadores migrantes que están construyendo la infraestructura, un problema que ya ha marcado otras iniciativas en la región.
A pesar de estas controversias, Arabia Saudita sigue adelante con su plan de dejar un legado arquitectónico y deportivo que podría cambiar la forma en que se celebran los mundiales en el futuro. El mundial 2034 será recordado, no solo por su innovación y tamaño, sino también por las tensiones que genera en torno a los derechos laborales y las libertades políticas.