El interés del Panathinaikos en Iheanacho es real y es la clave para que el Sevilla FC libere una ficha de un futbolista que no ha dado el rendimiento que se esperaba cuando se le fichó.
Iheanacho, una salida importante para el Sevilla
El Panathinaikos puede resolver la situación actual de Iheanacho en el Sevilla haciéndose con los servicios del delantero nigeriano. Iheanacho era el fichaje pero su bajo rendimiento y su mala forma física han hecho que Garcia Pimienta no cuente con él.
Según Relevo Deportes el club griego va en serio a por él, el Panathinaikos está interesado en firmar al futbolista en forma de traspaso. Sin embargo según ha informado Diario de Sevilla el club hispalense aún no tiene encima de la mesa ninguna oferta por el delantero, aunque son conocedores del interés del Panathinaikos en el jugador.
Iheanacho llegó al club andaluz en el mercado de verano pasado, con altas expectativas goleadoras. La directiva hispalense había observado el rendimiento del delantero en sus años en Leicester y les convencía. La salida del delantero liberaría una gran masa salarial para poder afrontar nuevas incorporaciones.
Sus cifras goleadoras con el club recién ascendido a la Premier League, hicieron pensar a la junta directiva sevillista que era el perfil de delantero que buscaban.
El artillero nigeriano en su etapa como jugador del Sevilla tan solo ha podido estrenar sus registros goleadores en Copa del Rey con tres goles en dos partidos jugados
El delantero a la espera de su posible salida del club sigue entrenando a las ordenes de García Pimienta, pero a esté le hace sospechar que no será convocado para el partido del sábado contra el RCD Espanyol y el motivo aparente es la inesperada llamada del ex-técnico canario a los jugadores del filial; Leandro Antonetti y Álvaro García Pascual.
Iheanacho no finaliza su vinculación con Nervión hasta junio de 2026, en este caso específicamente no hay negativa del jugador a marcharse del club si eso le permite seguir creciendo profesionalmente aunque sea lejos del Pizjuán.
