San Mamés se convirtió en el escenario de una batalla europea el 30 de enero, cuando el Athletic Club de Bilbao se enfrentó al Viktoria Plzen en la UEFA Europa League. El partido, que terminó con un marcador de 3-1 a favor de los locales, fue una muestra de la tenacidad y el espíritu combativo del Athletic, así como del coraje y la resistencia del equipo checo.
Primera parte: Dominio aplastante del Athletic
Desde el silbato inicial, quedó claro que el Athletic Club tenía la intención de aprovechar su condición de local. El equipo vasco, conocido por su pasión y su estilo directo, salió a presionar alto y a buscar el control del juego.
Los primeros minutos fueron de tanteo, con ambos equipos tratando de medir las fuerzas del otro. Sin embargo, fue el Athletic quien rompió el hielo.
Al minuto 25, un pase preciso de Iñaki Williams desde la banda derecha encontró a su hermano, Nico, quien abrió el marcador. Este gol no solo fue un alivio para los seguidores locales, sino que también pareció dar un impulso adicional al equipo de Ernesto Valverde, que comenzó a dominar cada vez más el encuentro.
Segunda parte: Pequeño susto, pero sentencia final
Sin embargo, la segunda parte fue un monólogo del Athletic. La pausa para el descanso pareció haber servido para ajustar la estrategia y motivar aún más a los jugadores. Al minuto 64, un centro botado por Álex Berenguer alcanzaba a Yeray, que cabeceaba, y mandaba el balón al fondo de la red.
El gol de Yeray fue un golpe duro para Viktoria Plzeň, que intentó reaccionar pero se encontró con una defensa bien organizada y un Julen Agirrezabala en portería que se mostró infranqueable cada vez que fue requerido. El Athletic no se contentó con la ventaja mínima y buscó aumentar la cuenta.
El Viktoria Plzeň, bajo el mando de Miroslav Koubek, no se desanimó. Sabían que cualquier oportunidad en San Mamés sería oro puro. Alrededor de la media hora de juego, una jugada de contragolpe bien ejecutada por parte de los checos dio sus frutos. Milan Havel, con un disparo colocado en el área, logró recortar distancias para los checos. Este gol dio esperanzas a los visitantes y puso un punto de tensión extra en el estadio.
La presión constante dio sus frutos cuando, en el minuto 95, un gran pase filtrado de Sancet, encontraba a Javi Martón, que hacía una gran vaselina frente a Jedlicka, y hacía el 3-1 definitivo.
Este resultado no solo refleja la superioridad del Athletic en su feudo, sino también la capacidad de Viktoria Plzeň para competir en un escenario tan exigente. Los checos mostraron valentía y un juego que, aunque no fue suficiente para puntuar, dejó una impresión de equipo luchador y organizado.
La victoria es significativa para el Athletic Club, no solo por asegurar su paso a la siguiente ronda de la Europa League, sino también por mantener viva la ilusión de sus aficionados en una temporada donde cada partido europeo en San Mamés se vive con la emoción de la épica. Por otro lado, Viktoria Plzeň, aunque derrota, demostró que tiene su lugar en el escenario europeo, prometiendo más batallas en el futuro.
Próximos compromisos de Athletic Club y Viktoria Plzen
El Athletic Club tendrá que enfrentarse al Real Betis, el domingo 2 de febrero, por la jornada 22 de LaLiga EA Sports.
Por otra parte, el Viktoria Plzen tendrá que medirse en la liga checa al Sigma Olomouc.
