FC Barcelona y Rayo Vallecano se enfrentaban el pasado lunes 17 de febrero en Montjuic, como último partido de la jornada 24 de LaLiga EA Sports. Los catalanes llegaban con necesidad de ganar, debido a los ‘pinchazos’ de Real Madrid y Atlético de Madrid en sus respectivos partidos de este fin de semana. Es por ello que la polémica tras los posibles errores se desató, ya que el Barça había conseguido ponerse en primera posición de la liga gracias a unas acciones cuanto menos controversiales.
Una jornada que ya venía trastocada
Después de algunas semanas complicadas para los colegiados, tras las quejas del Real Madrid en los días previos al derbi y los ataques directos al CTA, el punto de mira iba a seguir fijado en el arbitraje.
Primero, de nuevo en un partido del Real Madrid, los blancos iban a quedarse con uno menos ante el Osasuna tras la expulsión de Jude Bellingham por un insulto al árbitro principal, Munuera Montero. Esta sanción ha sido considerada como «injusta» por parte del madridismo. De hecho, el mismo jugador aseguró que «no hubo ningún insulto y se ve claramente en el vídeo».
Tan solo unas horas más tarde, el colegiado del Atlético de Madrid vs Celta de Vigo le enseñó la roja directa a Pablo Barrios apenas en el minuto 5 del encuentro por una temeraria entrada. Ya en la segunda mitad, señaló el punto de penalti tras un pisotón de Le Normand a Borja Iglesias dentro del área. A pesar de ello, Simeone comentó en rueda de prensa que ambas acciones le parecían correctamente juzgadas.
Sin embargo, no deja de ser sorprendente una jornada que sin duda ha estado marcada por penaltis y tempranas expulsiones. Además, tanto primer como segundo clasificado habían perdido momentáneamente sus opciones al liderato a la espera de lo que hiciera el FC Barcelona.
La polémica arbitral en el Barça vs Rayo
El único gol del encuentro llegó en el minuto 68, cuando Robert Lewandowski convirtió un penalti señalado tras una revisión del VAR por un agarrón de Pathé Ciss a Iñigo Martínez. Sin embargo, Presa cuestionó por qué el VAR intervino en esa jugada y no en una acción similar en el área contraria, donde Héctor Fort aparentemente sujetó a Abdul Mumin. Además, el Rayo vio anulado un gol de Jorge De Frutos por una supuesta interferencia de Nteka en posición de fuera de juego, lo que aumentó el descontento del equipo madrileño.
Por su parte, Hansi Flick, defendió el uso del VAR tras el encuentro, reiterando su confianza en la tecnología para corregir errores arbitrales.
Con esta victoria, el Barcelona ascendió al liderato de LaLiga, igualado en puntos con el Real Madrid pero con mejor diferencia de goles. Mientras tanto, el Rayo Vallecano se mantiene en la sexta posición, luchando por puestos europeos.