El pasado 4 de marzo, el Santiago Bernabéu fue testigo de una nueva edición del derbi madrileño en el marco de la ida de los octavos de final de la UEFA Champions League. El Real Madrid se impuso por 2-1 al Atlético de Madrid en un encuentro marcado por destellos individuales, planteamientos tácticos conservadores y una eliminatoria que queda totalmente abierta para la vuelta.
Un inicio eléctrico: El gol tempranero de Rodrygo
El Real Madrid salió con ímpetu y apenas a los 4 minutos, Rodrygo Goes abrió el marcador con un golazo. Tras una combinación con Fede Valverde, el brasileño recortó en el área y definió con un zurdazo preciso, aprovechando los espacios que dejó la defensa colchonera.
Este tanto tempranero marcó el tono del partido y puso al Atlético contra las cuerdas desde el arranque, obligándolos a reaccionar ante un Bernabéu vibrante.
La respuesta del Atlético: Julián Álvarez brilla
El Atlético de Madrid, fiel al estilo de Diego Simeone, no se descompuso tras el golpe inicial. A los 32 minutos, Julián Álvarez igualó el marcador con una obra maestra: un disparo desde fuera del área que se coló en el ángulo izquierdo de Thibaut Courtois.
Este golazo, imparable para el portero belga, evidenció la calidad individual del argentino y permitió a los rojiblancos ganar confianza, dominando por momentos la posesión y el ritmo del encuentro.
Brahim Díaz define el partido entre Real Madrid y Atlético de Madrid en la segunda parte
Tras un primer tiempo igualado, el Real Madrid encontró el desequilibrio en la segunda mitad gracias a Brahim Díaz. A los 55 minutos, el español protagonizó una jugada individual espectacular, dejando atrás a José María Giménez y definiendo con un derechazo que batió a Jan Oblak.
Este 2-1 dio ventaja a los blancos, pero también reflejó las carencias de un Atlético que, tras encajar, optó por replegarse y preservar sus opciones para la vuelta en el Metropolitano.
Táctica y falta de ambición: Conservación de ambos lados
El partido destacó por su carácter táctico y cierta falta de riesgo. Carlo Ancelotti, sin Jude Bellingham por sanción, apostó por un centro del campo musculoso con Tchouaméni y Camavinga, sacrificando creatividad por solidez.
Por su parte, Simeone mantuvo un enfoque conservador, priorizando el orden defensivo sobre la ambición ofensiva, lo que limitó las ocasiones claras de ambos equipos. Vinicius Jr. y Kylian Mbappé, las grandes estrellas merengues, tuvieron una noche discreta, mientras que Antoine Griezmann apenas inquietó a Courtois.
Todo abierto entre Real Madrid y Atlético de Madrid para la vuelta
Con un ajustado 2-1, el Real Madrid se lleva una ventaja mínima al Riyadh Air Metropolitano, donde se disputará la vuelta el 12 de marzo. El Atlético, apoyado por su afición y con la necesidad de remontar, tiene argumentos para soñar con la clasificación.
Las individualidades del Real Madrid marcaron la diferencia en la ida, pero el planteamiento colectivo del Atlético sugiere que la eliminatoria está lejos de decidirse. Este derbi promete un desenlace emocionante.