El gol de Ayoze rescata un punto para los de Marcelino que acabaron con uno menos
El futbolista canario volvió a marcar en la ciudad del Turia para aguar la fiesta a unos locales que suman su primer punto, pero se mantienen colistas. Posiblemente, el Valencia jugó su mejor partido en lo que llevamos de Liga. Pero un Villarreal en racha, que acabó la contienda con 10 jugadores, se llevó un punto con muy pocos argumentos.
Los hombres dirigidos por Rubén Baraja saltaron al terreno de juego exhibiendo un juego preciosista, con muchas variantes y fluido en ataque. La puesta en escena puso en jaque a los de Marcelino, que no encontraron, durante mucho tiempo, la manera de salir de su zona de tres cuartos.
Todo les salía en ese momento a los ches y, en un córner botado desde el costado izquierdo por Pepelu, Hugo Duro acabó entregando el 1-0 a los suyos. Aunque tuvieron que aguardar una larga revisión de VAR antes de festejar sin reservas.
Desafortunadamente para el Valencia, cuando las dinámicas son negativas, no sólo basta con jugar bien, sino que hace falta un punto de suerte. Justo la que encontró el Villarreal, un equipo en racha, en el añadido del primer acto. Cuando Ayoze marcó el 1-1 con un bonito disparo que rebotó en la rodilla de Mosquera e hizo inútil la estirada de Mamardashvili.
El atacante tinerfeño confirmó su capacidad a la hora de protagonizar acciones decisivas. Y también que tiene una fijación especial con los de la ciudad del Turia. Con cuatro dianas, es el conjunto que más ha encajado de botas del canario, que ya marcó un doblete en Mestalla el pasado mes de abril, con la camiseta del Betis.
Dicen que los goles cuando se agota el tiempo afectan psicológicamente al rival, pero los del Pipo Baraja no acusaron lo más mínimo el golpe asestado por el Submarino Amarillo. Al contrario, les espoleó para encarar la segunda parte con mayor intensidad y motivación.
Con cada minuto que transcurría, el asedio valencianista se acrecentó. En esa tesitura, dos detalles marcaron la segunda entrega del derbi. La entrada de un Rafa Mir suplente por primera vez en Liga, y la expulsión por una torpeza de Pape Gueye en el 68′.
Las ocasiones de peligro cayeron de lado local sin cesar, pero cuando no fue Diego Conde, otros factores se encargaron de evitar el 2-1 con el que celebrar el primer triunfo de la temporada. Se vio al mejor Valencia de la temporada. Pero otra vez, como contra el Barcelona, la falta de suerte se ocupó de dejarles con un sabor más agrio que dulce.
Con este punto, los ches estrenan su casillero, pero no logran salir de la última plaza. Por su parte, los de Marcelino se aferran a la zona noble de la clasificación con ocho unidades.