El Girona de Michel se olvida de la medalla de plata

El Girona enfrenta al Granada en el cierre de una temporada llena de éxitos y desafíos, asegurando un destacado tercer puesto en La Liga

Dovbyk delantero ucraniano del Girona celebra su tercer gol durante el partido correspondiente a la jornada 21 de LaLiga que enfrentó al Girona y al Sevilla en el estadio de Montilivi.
Artem Dovbyk celebrando un gol en el Montilivi. | EFE

Esta noche, el Girona se enfrentará al Granada en lo que será el último partido de una temporada de ensueño y, a la vez, de oportunidades perdidas.

Los catalanes, bajo la dirección de Michel, han maravillado a propios y extraños con un fútbol vibrante y efectivo, llegando incluso a soñar con la conquista de La Liga. Sin embargo, esos sueños se desvanecieron en el tramo final del campeonato, y el equipo ha terminado por conformarse con un meritorio tercer puesto.

Una temporada memorable

El desempeño del Girona durante la mayor parte de la temporada ha sido impresionante. Desde el inicio, el equipo mostró una solidez y un estilo de juego que le permitió codearse con los gigantes del fútbol español. Con un ataque dinámico y una defensa compacta, los de Michel se convirtieron en la revelación del torneo. Su capacidad para sumar puntos tanto en casa como fuera fue clave para mantener viva la esperanza de alcanzar la gloria.

El sueño se desvanece

A pesar del gran rendimiento, la recta final de la temporada resultó ser un desafío insuperable. El Girona comenzó a perder fuelle en los momentos decisivos, permitiendo que el Real Madrid se escapara en la cima de la clasificación. Aun así, el segundo puesto parecía alcanzable hasta que una serie de resultados adversos dejó a los de Michel con solo la posibilidad de luchar por el tercer lugar.

Celebración Real Madrid | @diarioas
Celebración Real Madrid | @diarioas

La brecha con el Real Madrid se amplió hasta los 16 puntos, una diferencia insalvable que reflejó la superioridad blanca.

El tercer puesto es un logro significativo para el Girona, especialmente considerando que podría terminar la temporada a solo un punto del Barcelona, el actual segundo clasificado. Este hecho resalta lo cerca que estuvieron los catalanes de lograr una hazaña aún mayor.

Si bien quedarse a las puertas del segundo lugar puede dejar un sabor agridulce, también debe servir como un recordatorio de lo que el equipo es capaz de lograr.

Un Granada descendido

El partido de esta noche contra el Granada presenta una oportunidad para cerrar la temporada con una victoria. El conjunto andaluz, ya matemáticamente descendido, ha tenido una campaña para el olvido, ganando solo cuatro partidos en toda la liga. Esto podría facilitar la tarea del Girona, aunque en el fútbol nunca se puede dar nada por sentado.

Michel y sus jugadores saben que deben mantener la concentración y el compromiso hasta el pitido final, sin subestimar al rival, y ofreciéndole un último baile a sus seguidores en Montilivi.

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