A pesar de todas las incorporaciones internacionales que ha realizado el Atlético de Madrid en este mercado, la mayoría de sus piezas clave proceden del mismo país: Argentina. Y es que, en la pasada campaña, fueron los jugadores argentinos los que más aportaron al equipo. Hoy vamos a analizar su rendimiento en la temporada anterior y lo que pueden aportar en la que está por comenzar.
Giuliano Simeone: de desconocido a héroe
El joven atacante aterrizó en el Atlético de Madrid como ‘el hijo del entrenador’. Muchos pensaban que jugaba por ‘enchufe’ pero el futbolista demostró, con su pasión y esfuerzo en el campo, que eso no era así y que es un jugador con gran talento y calidad. Giuliano enamoró a los colchoneros con el coraje que demuestra cada vez que salta al terreno de juego, luchando cada balón como si fuera el último y yendo a todos los duelos sin miedo.
Tácticamente hablando, es un jugador muy veloz y ágil. Simeone se adapta con facilidad a los diferentes esquemas de juego de su entrenador pudiendo jugar con distintas formaciones. Es un jugador que, aunque es delantero, baja a ayudar a defensa y muestra un gran despliegue físico sin balón. Esta última temporada el argentino ha marcado cinco goles y ha dado nueve asistencias. Se espera que para esta nueva campaña el joven extremo rinda igual o mejor que en la pasada.
Julián Álvarez: el obrero del gol
El «9» argentino llegaba al Atlético de Madrid en el verano pasado. Procedente del Manchester City, el delantero no había tenido los minutos que le hubiera gustado tener y llegaba a Madrid buscando ser titular. El fichaje de Julián emocionó como nunca a la afición rojiblanca y el jugador no defraudó. Julián ha estado a la altura de lo que se esperaba de él, siendo el máximo goleador de los colchoneros con 29 goles en todas las competiciones. El futbolista se ha convertido en la nueva estrella del equipo. Con humildad y pasión, se ha ganado el corazón de toda la afición del club madrileño.
Julián es un jugador inteligente, que sabe moverse entre líneas y leer los espacios que deja la defensa rival. A pesar de ser punta, también puede jugar de extremo si es necesario. Es un futbolista que combina rápido y con criterio en espacios reducidos. Su punto más fuerte es su gran definición, ya que si recibe el balón cerca del área rival puede meter gol desde cualquier ángulo. Es por todo ello que se espera que en esta temporada brille igual o más que en la anterior.
Nahuel Molina: un lateral ofensivo
Aunque parece que su futuro está más fuera que dentro del Atlético de Madrid, el defensa sigue formando parte de la plantilla a día de hoy. El lateral argentino no mostró su mejor rendimiento en el curso pasado. A pesar de ello, el campeón del mundo tiene cualidades que han aportado al equipo a lo largo de su estancia.
Nahuel es un jugador muy físico que va a los duelos con fuerza. Además, aunque juega como defensa, tiene un gran aporte ofensivo y crea peligro cuando se acerca al área rival. Añadido a eso, el futbolista ha jugado de carrilero en alguna que otra ocasión. Aunque no haya sido una pieza clave este año para el Cholo, el argentino sigue siendo un jugador con gran talento.
Juan Musso: un muro en la portería
El recién fichado por el Atleti es un suplente de oro. El guardameta ha demostrado su gran valía en los partidos en los que ha jugado. Con siete partidos en Copa del Rey, el argentino supera a Jan Oblak en cuanto a porcentaje de paradas, con un 79,2% frente al 72,4% del portero titular. En liga ha disputado dos partidos en los que no ha recibido ningún gol.
Con una estadística total de seis porterías a cero en nueve partidos en los que ha jugado y la titularidad en Copa, el futbolista ha demostrado ser un suplente con el que la afición puede estar tranquila en caso de lesión de Oblak.
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