Con el permiso de Lionel Messi, Argentina tiene nuevo número ’10’, Franco Mastantuono. El jugador del Real Madrid entró como revulsivo en el partido ante Ecuador y lo hizo con el legendario dorsal de la Albiceleste. Salió en el minuto 62 sustituyendo a Leandro Paredes, siendo la primera pieza que movió Lionel Scaloni en la segunda parte para intentar darle la vuelta al choque. Al entrar en el campo, se convirtió en el jugador más joven en vestir este dorsal con la selección con 18 años y 23 días, superando a Maradona, que lo hizo con la misma edad, pero con nueve meses y tres días.
Esta decisión recayó directamente sobre su entrenador. Scaloni explicó en rueda de prensa que Lionel Messi no iba a viajar a Guayaquil para darle descanso y que el número ’10’ pasaría a ser de Thiago Almada. Sin embargo, el jugador del Atlético de Madrid sufrió unas molestias en el sóleo y también se quedó fuera de la convocatoria. Sin ninguno de estos jugadores, el elegido fue Franco Mastantuono. «Entró bien, tiene personalidad, le gusta jugar con la pelota y siempre intenta, es lo importante», afirmó el seleccionador albiceleste.
A pesar de que no fue el mejor partido del jugador del Real Madrid, mostrando varias imprecisiones con balón y sufriendo con la estrecha línea defensiva de Ecuador, Mastantuono sigue regodeándose entre los grandes. En un equipo con jugadores más experimentados como Lautaro, Mac Allister, Julián o Nico González -todos ellos con más bagaje en la selección que el ex de River-, Scaloni decidió que el ’10’ sería para Franco.
Adaptándose a la élite
El fichaje por el Real Madrid le está sentando muy bien a Franco Mastantuono. Desde su llegada al equipo blanco, ha sido titular en dos encuentros de los tres que ha disputado y el primer partido del parón de selecciones estrenó titularidad con Argentina. Aún aclimatándose a la liga española y al ritmo de la selección nacional, Franco está dejando muchos destellos de su calidad. Tanto Xabi Alonso como Lionel Scaloni tienen fe en él y a sus 18 años está convirtiéndose en pieza habitual en uno de los mejores equipos y una de las mejores selecciones del mundo. Un diamante en bruto.








