En un Real Madrid de Xabi Alonso que ha apostado por la juventud y la cantera, Fran García emerge como una pieza clave, siendo un lateral con garra, compromiso y capacidad física y sorprendiendo a propios y extraños.
De retorno modesto a protagonista inesperado
Tras ejercer de fijo en el Rayo Vallecano, regresó al Real Madrid en 2023 con perfil bajo y un rol claramente secundario, pero desde la llegada de Xabi Alonso, su papel ha dado un giro total. En el nuevo sistema de carrileros, el lateral español ha encontrado el contexto ideal para poder explotar sus virtudes y brillar.
En plena disputa del Mundial de Clubes, Fran se ha ganado la titularidad en partidos clave y ha mostrado una versión mucho más madura bajo el mando de Xabi Alonso; su fútbol ha crecido exponencialmente en confianza y continuidad con el mapa de instrucciones tácticas del entrenador tolosarra. Lo que parecía una vuelta discreta, hoy es una apuesta consolidada.
Carrilero de garantías al servicio del esquema de Xabi Alonso
Con la llegada de Xabi Alonso, Fran García ha explotado como carrilero en un sistema 5-3-2 que potencia al máximo su despliegue físico y su capacidad de ida y vuelta. El técnico tolosarra le ha dado confianza y libertad en un rol que exige tanto rigor defensivo como presencia constante en campo rival. Fran no solo ha respondido: ha elevado su nivel. Ya no es un lateral que aparece por momentos, sino una pieza estructural en la circulación y el desequilibrio por banda. Sus conducciones, su precisión en el pase y su agresividad para recuperar en campo contrario han hecho que el equipo gane profundidad sin perder solidez.
En el Mundial de Clubes, su crecimiento se ha materializado en hechos: fue titular en el partido más exigente del torneo ante el Borussia Dortmund, y acabó siendo elegido MVP tras marcar un gol y dar una asistencia. Un partido completo, en el que mostró jerarquía, lectura táctica y un desparpajo impropio de alguien que, hace apenas unos meses, era considerado un recurso de rotación. Hoy, Xabi lo ve como un fijo en su estructura, y el madridismo empieza a entender por qué. Fran García no está tapando un hueco: está reclamando un sitio que ya le pertenece.
¿Qué techo tiene Fran García?
Con contrato hasta 2027 y apenas 25 años, la progresión de Fran García es una realidad que ya no admite debate. De recurso de rotación a titular solvente, su rendimiento lo ha colocado en la élite de los laterales europeos. Ha respondido con creces al reto de jugar en el Real Madrid y ha demostrado que, con confianza, puede ser mucho más que un nombre de plantilla.
En un equipo que no espera a nadie, Fran ha sabido hacerse un sitio. No por cartel, sino por fútbol. No por ruido, sino por rendimiento. Y si algo ha dejado claro en este Mundial de Clubes es que su historia en el Madrid no ha hecho más que empezar.







